La condonación a Televisa de 3 mil 334 millones de pesos realizada por el SAT,
refleja una vez más como se encuentra México, en medio de un atascón de
podredumbre y corrupción política a favor de la mal llamada “clase empresarial”
y viceversa; que con independencia de lo depredador que resulta el caso, deja expuesto
el mecanismo que han utilizado todos estos sátrapas. Unos para exigir el no
pago de impuestos y otros para hacerlo posible todos como parte de la misma
clase ¿y el pueblo en general? como siempre; displicente, alejado y permisivo de estos actos. La población es
quien permite francamente, hacer viable la corrupción y el actuar impune de
actos tan cínicos, revisemos como es que esto es posible:
Primero Televisa o cualesquiera otra “empresa” de este nivel, deja de pagar el monto de los impuestos correspondiente al ejercicio que le plazca;
- Acto seguido, contrata o cuenta con el área contable lo suficientemente capas para entablar juicios, que permitan lograr el objetivo; el no pago de los impuestos que a sus intereses convenga urdiendo el “pleito largo” para hacer que transcurran los años necesarios para que,
- Posteriormente la autoridad fiscal en turno formule o mejor dicho se confabule entre si SHCP, SAT, Tribunales especiales etc., para generar los lineamientos dentro de un presupuesto de egresos y una miscelánea fiscal de ingresos X; que contenga reducciones, créditos, exenciones o de plano condonaciones sobre adeudos fiscales.
- Esta confabulación de criminales de cuello blanco, se enviara al “congreso de la unión” para su aprobación. Hay que precisar que el congreso siempre estará a modo en este país capitalista. Resulta indispensable para mayor entendimiento; que no interesa, el partido gobernante se trate del que se trate PRIAN, PRD, pvem, pt, na, mc etc., pues todos sin exclusión, no representan los intereses de la nación, expresados en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos promulgada en 1917 y mucho menos de la gente, que vive de su trabajo bien sea en la económica formal o informal.
Es así que un buen día aparece la noticia, solo para hacer el tramite, nota que no es difundida en horario espectacular ni cosa que se le parezca, pues de lo que se trata es que pase de la forma más gris o encubierta posible, entre los meses de abril y mayo, temporada en que los “mexicanos descalzos, o mejor dicho los de a pié” deben presentar declaración de impuestos, para las persona físicas ó morales. Son sesenta días de vorágine impositiva, que en realidad es la pantalla para los grandes atracos que se han perpetrado en el ámbito fiscal, mínimamente desde el año de 2007 cuando se hizo publico el mecanismo de los famosos "Créditos Fiscales". Si deseas corroborar esto escucha lo que declara el Director del SAT Aristoteles Nuñez.
Es una
verdadera lástima que aduciendo razones “de secreto fiscal” el gobierno federalno haya difundido los nombres de los grandes consorcios a los que se benefició con la devolución y condonación de
impuestos en aquel año 2007. Pero en este México de monopolios y oligopolios no es difícil
descifrar a quiénes se trató de ocultar veamos: la Auditoría Superior de la
Federación reportó documentalmente los créditos fiscales en cuestión en; dos
empresas televisoras, justo en un país donde existe un robusto duopolio en ese
sector, al igual que en el cervecero y el refresquero. Grandes constructoras,
Telefónicas, Cementeras, Empresas de entretenimiento y mineras.
Adivinen
quiénes son, les aseguramos que el ejercicio de imaginación sólo les tomará
unos cuantos segundos, mientras tanto continúen viendo los canales de Televisa
y Tv Azteca, tomando una cerveza o un refresco de las empresas Modelo o Femsa (Coca
Cola), y hablen por su celular ya sea que estén contratados en un plan o “amigo
gandaya” de Telcel o Iusacell, si no cuentan con cel o esta descargado o no hay
servicio, pues lo háganlo por el fijo de Telmex, así contratarán a ICA para que
les construya su jacal con productos de Cemex, mientras en las noticias
difunden de cuantos trabajadores fueron reprimidos y/o resultaron muertos en el
Grupo Minero México, “por exigir el respeto a sus derechos” etcétera, etcétera.
La condonación de 3 mil 334 millones de pesos a Televisa de Emilio Azcárraga Jean,
no son privativas de este, lo mismo se hizo a Carlos Slim, German Larrea Mota
Velazco, o cualesquier otro de la misma calaña. Se les continuarán condonando
los montos de los impuestos que esto ladrones no deseen pagar y punto. Todo
para que estos oligarcas continúen engrandeciendo sus fortunas a costa de que
todos paguen menos ellos.
La colocación
de un bono global por un monto principal de seis mil 500 millones de pesos por
parte de Grupo Televisa, es la respuesta cínica al pueblo de México, dicen
funcionarios de la televisora que esa emisión “mejorará el perfil de
vencimiento de deuda de la compañía, ampliándolo hasta 2043 fecha de su
término” el bono global de deuda, tiene una tasa de 7.25 al vencimiento, cuya
oferta se esperaba concluir el 14 de mayo.
“El monto de
esta emisión representa el 11.45 por ciento de la deuda total actual, Alfonso de Angoitia, vicepresidente Ejecutivo
de Grupo Televisa, declaró burlonamente que el cupón logrado es el más bajo quehaya obtenido un corporativo latinoamericano en una emisión a 30 años en moneda
local. La oferta estuvo sobre subscrita más de cinco veces. El enorme interés
por parte de los inversionistas refleja las perspectivas favorables de largo
plazo de Televisa. Es también un voto de confianza en la estabilidad financiera
de México y en el dinamismo de su entorno macroeconómico”, enfatizó.
¡¡¡¡¡Que poca madre!!!!!!.- No hay otra
expresión que se ajuste a lo que representa el tamaño del despropósito dicho
por ese hijo de perra. La estabilidad financiera es ni mas ni menos, de que el
acto de pagar los impuestos corran a cargo del pueblo en general, ya que los
poderosos NO LOS PAGARAN, amparados por la nomenclatura de excrecencias congresistas beltrones, gamboas, maderos, corderos, barbosas, aureoles, escobares, arriolas,
emiliogonzalez, y demás que forman la clase política burguesa de esta nación.
Incorporados en las fuerzas políticas partidarias que se han adueñado de modelo
“democrático” mexicano.
Lo anterior esperamos
que el pueblo en general abra su mente y entienda que ver la televisión en
México no únicamente hace estúpidos y sabemos que no es fácil para alguien, que
le digan que deje de ver la televisión cuando toda su vida se la ha pasado
viéndola, el problema es que verla todos los días produce muchos efectos
mortales y mucho me temo que pasa lo mismo con el uso de la computadora, el
suicidio colectivo de toda una nación no es desproporcionado que se da por el
binomio medios electrónicos de comunicación y nomenclatura política.
POLITICOS Y EMPRESARIOS HASTA LA
ETERNIDAD
Emilio Azcárraga Vidaurreta fundó EN 1930 la
estación de radio XEW, que resultó un éxito en todos los sentidos. A partir de
ahí, obtuvo una concesión para operar un canal de televisión, en 1952.
Sin embargo, otras personas también
obtuvieron una concesión similar. Curiosamente, los beneficiados fueron
familiares de dos ex Presidentes de México: la familia Alemán y la familia
O´farril Avila.
La primera de
ellas, descendiente de Miguel Alemán Velazco, cuyo lema fue “impulsar la
modernidad del país” y la segunda del iniciador de las contrarreformas a la Constitución de 1917, en colaboración
con la burguesía y el clero de la iglesia católica de Manuel Ávila Camacho. Así
el primer canal comercial de televisión en México y América Latina se inauguró
el 31 de agosto de 1950. Un día después, el 1 de septiembre, se transmitió el
primer programa, con la lectura del IV Informe de Gobierno del presidente de
México, licenciado Miguel Alemán Valdés, a través de la señal de la XHDF-TV
Canal 4 de la familia O'Farrill.
En ese año,
la XETV-Canal 6 de Tijuana, Baja California, y la XEQ-TV Canal 9 (actualmente
con las siglas XHTM Canal 10), en Altzomoni, Estado de México, también inician
sus transmisiones.
La XEW-TV
Canal 2, propiedad de la familia Azcárraga, fue inaugurada en 1951, la cual
transmitió desde el Parque de Beis bol Delta, en el Distrito Federal. Ese año,
la XHGC Canal 5, del ingeniero Guillermo González Camarena, quedó integrada al
dial televisivo. Para 1955 se fusionan esos tres canales, dando paso a la
empresa Telesistema Mexicano.
Al otorgarse dos nuevas concesiones
televisivas, que operaron los canales 13 y 8, el Grupo Televicentro tuvo como
competidores a dos grupos que no tenían el mismo origen
político-ideológico-partidista que sus integrantes.
Durante el gobierno de Gustavo Díaz
Ordaz se entregaron dos concesiones a empresarios no identificados ni ligados
con facciones originarias del movimiento revolucionario, sino de las nuevas
élites del sistema político mexicano posterior a 1928; fue así que se otorgaron
a dos empresarios católicos, como es el caso de Eugenio Garza Sada, cabeza del
Grupo Monterrey, y el de Francisco Aguirre Jiménez, que poseía el Grupo Radio
Centro. Al primero de ellos se le otorgó el Canal 8 y al segundo el Canal 13.
EL ADN DE UN SÁTRAPA
QUE ES TOLERADO POR MILLONES DE
MEXICANOS
A QUIENES DEPREDA:
EMILIO AZCARRAGA JEAN
“México es un país de una clase modesta muy jodida,
que no va a salir de jodida.
Para la televisión es una
obligación llevar diversión a esa gente
y sacarla de su triste realidad
y de su futuro difícil.”
Emilio Azcárraga Milmo
Fueron las palabras de Emilio Azcárraga Milmo, El
Tigre, pronunciadas hace exactamente dos décadas, el 10 de febrero de 1993. Su
discurso fue improvisado. Se celebraba el éxito de la telenovela Los Ricos
También Lloran que catapultó a la fama internacional a Verónica Castro. El
Tigre andaba feliz y se puso sincero.
“Los ricos, como yo, no somos clientes porque los
ricos como yo no compran ni madres”, abundó el dueño del imperio Televisa. Los
asistentes rieron. Azcárraga Milmo ya era considerado por la revista Forbes
como el hombre más rico de América Latina. Aún Carlos Slim no se convertía en
magnate global ni buscaba rivalizar con Televisa en el mercado audiovisual.
Mucho menos El Tigre quería ingresar al mercado de las telecomunicaciones.
“Nuestro mercado en este país es muy claro: la clase
media popular. La clase exquisita, muy respetable, puede leer libros o Proceso
para ver qué dicen de Televisa… Estos pueden hacer muchas cosas que los
diviertan, pero la clase modesta, que es una clase fabulosa y digna, no tiene
otra manera de vivir o de tener acceso a la distracción más que la televisión”,
agregó Azcárraga.
Con una claridad típica de su estilo, El Tigre quitaba
los velos de la retórica y confesaba lo que todo mundo sabía en este país y
nadie se atrevía a decirlo: la televisión comercial es para enajenar
(“divertir”) a los jodidos. No pretende más que incorporar a los pobres a la
sociedad de consumo. Y tampoco pretende sacarlos de esa condición. Mucho menos
instruirlos.
Para Azcárraga Milmo, como para su padre Emilio
Azcárraga Vidaurreta, y para su hijo Azcárraga Jean la televisión simplemente
es un gran negocio: venderle espectáculo a los pobres y, a cambio, garantizarle
al sistema la sumisión de los “jodidos” y el control político vía la
información teledirigida.
“Somos soldados del PRI y del presidente”, dijo en
otra de sus frases célebres el inigualable Tigre, famoso por sus desplantes,
por su ímpetu de patriarca y sus lujos.
Han pasado 20 años de esa declaración. El Tigre
falleció en 1997. Su hijo Emilio Azcárraga Jean prometió una apertura. El gobierno
de Salinas de Gortari vendió Imevisión para crear una “competencia”, TV Azteca,
de Ricardo Salinas Pliego. Y lejos de mejorar los contenidos televisivos, éstos
han empeorado.
Ni siquiera las telenovelas han mejorado. Las
audiencias extrañan aquellos melodramas de Verónica Castro. Y prefieren ahora
las telenovelas colombianas, brasileñas o las de Argos, con un mínimo de
coherencia y mejor calidad en su producción.
Si Azcárraga Milmo confesó que su televisión es para
“jodidos”, Salinas Pliego ha dado suficientes muestras para llevar este axioma
a su máxima expresión. TV Azteca usa y abusa la ignorancia prevaleciente en los
televidentes. Ha hecho de la estridencia y el mal gusto un gran mercado. Es la
vitrina para enganchar a los “más jodidos” en sus tiendas Elektra, en su banco
Azteca, en sus malas réplicas de los productos de Televisa.
Primera lección: la competencia en televisión abierta
no es garantía de mejorar contenidos.
Por el contrario, sí prevalece el modelo de una
televisión hipercomercializada, orientada sólo al entretenimiento de baja
calidad, bajo costo y alta ganancia, el espejismo del rating es sólo una
justificación para la vulgaridad.
Una y otra vez, Ricardo Salinas Pliego y Emilio
Azcárraga Jean justifican la pésima calidad de la televisión mexicana,
argumentando que eso es lo que “la gente quiere ver”.
“Si no están de acuerdo, cambien de canal”, han
afirmado. Con esto confirman el menosprecio a los más elementales derechos de
las audiencias, es decir, a contenidos dignos, diversos, de entretenimiento,
información y publicidad que no hagan trampas con tal de mantener a los
televidentes, a los actores y a los productores a expensas de los mercaderes
del espectro.
Segunda lección: la dictadura del rating no puede ser
el único criterio para medir el éxito o el futuro de una industria. Mucho menos
en la era de los cambios digitales y la convergencia.
Han pasado 20 años de aquel discurso de Azcárraga
Milmo y los legisladores vuelven a analizar una reforma muy ambiciosa en
radiodifusión y telecomunicaciones. El 80% de la iniciativa presentada por el
Pacto por México se dedica a regular un mercado de telecomunicaciones, dominado
por Telmex-Telcel, y el 20%, a regular el mercado de televisión y radio,
dominado por Televisa y TV Azteca.
De los criterios para mejorar los contenidos hay muy
poco o casi nada. Se eliminó la obligación de que el Estado “garantizará el
derecho a las audiencias” (en el artículo 6 constitucional). Se incluyó la
prohibición a la publicidad integrada, pero ningún criterio para matizar la
excesiva comercialización en la pantalla.
Es evidente que en la actualidad no se respeta la
norma de que sólo el 20% de los contenidos deben ser publicitarios. La realidad
es inversa: sólo el 20% de los contenidos no es venta, propaganda o publicidad
inducida. La pantalla está plagada de infomerciales, de “productos milagro”, de
chabacanerías para bajar de peso, de astrología mala, de gritones que lo mismo
pontifican de una crema de afeitar que de un partido de fútbol.
Han pasado dos décadas y se cree que con dos o tres
cadenas nacionales de televisión este medio entrará a la modernidad, según los
criterios de la OCDE y las demandas de muchos especialistas.
Bienvenida esa competencia, pero si van a replicar el
mismo modelo de Televisa sólo tendremos una reproducción al infinito de una
televisión que ve clientes y no audiencias, que maltrata a sus actores y
encumbra a los dóciles.
Imaginemos los noticieros de seis cadenas
repitiéndonos al unísono lo que el gobierno federal quiere que se transmita. Imaginemos
programas deportivos en los que cada cadena defienda a sus equipos de fútbol.
Imaginemos a cada cadena vendiéndonos en todos sus programas sus ofertas de
internet, telefonía y video.
Una reforma que sólo privilegie la competencia
convertirá a los contenidos convergentes (los de televisión, telefonía e
internet) en un gran supermercado. Se podrán eliminar monopolios económicos,
pero no monopolios de opinión pública, y menos proponer un modelo distinto al
de la “televisión para jodidos”.
En este punto la reforma constitucional que se discute
en el Congreso de la Unión no quiere entrarle. Nada que afecte el modelo único
de televisión comercial. Nada que ofrezca un modelo de medios públicos (que no
gubernamentales). Ni siquiera existe una definición de medios públicos en la
iniciativa. Mucho menos la posibilidad de abrir el espectro a propuestas
comunitarias, indígenas o universitarias.
¿Es esa la democratización de los medios?
Me temo mucho que no. Si acaso, es la proliferación de
muchos bajo el mismo modelo que no incorpora el punto de vista y las
necesidades de las audiencias.
Jenaro Villamil
¿LA CLASE MEDIA EXISTE EN MEXICO?
MIRA BARTOLA
CHAVA FLORES
Ficha técnica sobre la clase media en México
“La
moderna sociedad burguesa que se alza sobre las ruinas de la sociedad feudal no
ha abolido los antagonismos de clase. Lo que ha hecho ha sido crear
nuevas clases, nuevas condiciones de opresión, nuevas modalidades de lucha, que
han venido a sustituir a las antiguas.
“Sin embargo,
nuestra época, la época de la burguesía, se caracteriza por haber simplificado
estos antagonismos de clase. Hoy, toda la sociedad tiende a separarse,
cada vez más abiertamente, en dos grandes campos enemigos, en dos grandes
clases antagónicas: la burguesía y el proletariado.” (Carlos Marx y Federico Engels, Manifiesto del
Partido Comunista, 1848).
Consideraciones
sobre la propaganda del Banco Mundial
El Banco Mundial (organismo promotor de las privatizaciones a
nivel mundial y principal organizador del modelo capitalista Neoliberal a
escala planetaria), recientemente ha publicado un reporte titulado “La
movilidad económica y el crecimiento de la clase media en América Latina”. En
este reporte el Banco Mundial (B.M.), hace las siguientes consideraciones:
1. La
pobreza “moderada” en América Latina ha disminuido de más del 40% en 2000, a un
30% en 2010.
2. Se
ha llevado a cabo una movilidad económica en esta región, es decir, según este
criterio personas que pertenecían a los sectores pobres, a los trabajadores,
han pasado a formar parte (se han movilizado), a clases con mayor poder
adquisitivo: a la clase de los “vulnerables” y a la clase media.
3. La clase media en América Latina creció y lo hizo de manera
notable: de 100 millones de personas en 2000 a unos 150 millones hacia el final
de la última década.
Asimismo, el
BM, plantea la siguiente hipótesis; “la actual sociedad capitalista Neoliberal
está divida o compuesta por cuatro clases sociales:
- Los pobres, con ingresos de cero a cuatro dólares, que representan 30.5 por ciento de los latinoamericanos;
- La vulnerable, con ingresos de cuatro a 10 dólares, equivalente al 37.5 por ciento;
- La media, con ingresos de 10 a 50 dólares, que equivale al 30 por ciento,
- Finalmente la élite con más de 50 dólares, de retribuciones que encarnan el 2 por ciento”.
Confrontemos la afirmación del Banco Mundial, con la situación que
priva
en México
En primer
lugar es conveniente hacer un análisis histórico de la aparición, desarrollo y
decadencia de las clases medias, tanto a nivel internacional, como en México.
Los
orígenes de la clase media la podemos ubicar en Inglaterra en el siglo XVII, en
donde uno de los resultados de las revoluciones liberales en ese país, fue el
debilitamiento de la monarquía y en consecuencia el fortalecimiento de sectores
de burgueses, quienes se apropiaron extensiones de tierras. Asimismo, se dio
lugar a una intensa actividad comercial, “todo
lo cual redundó en la aparición de un grupo social cada vez más numeroso
formado por gente dedicada al comercio, pequeños terratenientes, clérigos,
profesionales liberales como abogados, arquitectos, escritores,...,
quienes, sin ser ricos, tenían un cierto poder adquisitivo que los capacitaba,
entre otras cosas, para poder votar en el Parlamento.
De entre la burguesía pronto surgirían auténticos magnates que muy comúnmente
lograban acceder a la nobleza, sin por ello abandonar sus actividades; esta
característica fue propia de Inglaterra, pues en otros países europeos como Francia o
España, acceder a la nobleza solía significar que el burgués abandonaba sus
anteriores actividades”
En México, se dice que desde la época de la Revolución de 1910-1917, fue
importante la participación de la clase media (intelectuales, bajo clero
político, militares de bajo rango, etc.,),
En un libro publicado en el 2012 denominado “Clase
mediero. Pobre no más, desarrollado aún no”, el economista mexicano
Luis de la Calle y el politólogo mexicano Luis Rubio describen una nación en la
que muchos políticos todavía consideran el electorado como pobre y rural pero
los patrones de consumo revelan una tendencia hacia la urbanización
y la movilidad ascendente. A juzgar por los ingresos de las
familias, pero también por cosas como el alquiler de y la propiedad de
viviendas, las compras de electrodomésticos, el acceso a Internet y las salidas
al cine, argumentan que hoy la población de clase media
es la mayoría en México.
Cuál
es la realidad de nuestro país?
Sin negar la existencia de la clase media en
México, podemos demostrar a la luz de los datos oficiales y de un análisis más
riguroso de la realidad mexicana, podemos plantear lo siguiente:
· La
aplicación del modelo capitalista Neoliberal (cuya aplicación en México, la
podemos remontar al año de 1978, cuando López Portillo firmo una carta de
intención con el Fondo Monetario Internacional (FMI), a efecto de que a cambio
de préstamos el gobierno mexicano aplicaría una política económica de
contención de los salarios de los trabajadores, y de una baja inversión en
aspectos de carácter social. Aunque formalmente la aplicación de este modelo se
inicia en México en 1982, con el presidente Miguel de la Madrid Hurtado.
· A
raíz de las privatizaciones en nuestro país, dado que existían 1155 empresas
públicas, se vendieron a los privados aproximadamente mil, generándose
mutilaciones de decenas de Contratos Colectivos de Trabajo, y por lo tanto despidos
injustificados de miles de trabajadores. Asimismo la contención de los
salarios, como la política de desempleo aplicada durante más de tres décadas
han generado que en nuestro país, no solamente no haya crecimiento económico,
sino que el aumento de la pobreza ha sido progresivo. Para investigadores como
Boltvinik, del Colegio de México, la medición de la pobreza en México “arroja una incidencia de la pobreza en el país de
82.8 por ciento. En ambos diagnósticos poco más de 90 millones de personas son
pobres en México y éste es, por tanto, un problema que afecta a la inmensa
mayoría y no a una pequeña minoría de la población como quieren hacerlo
aparecer quienes hablan de 15 o 25 millones de pobres extremos” (Economía
Moral, periódico La Jornada, Viernes 13 de abril de 2012)
· En
consecuencia, grandes grupos sociales de la población mexicana, no solamente
han visto reducidos sus niveles de ingreso en las tres últimas décadas, sino
que han caído en una situación en que han perdido empleo, vivienda, una buena
alimentación, poco acceso a la cultura, así como acceso a las instituciones
educativas, llevándose a cabo un proceso de polarización social.
· Con
la aprobación de la nueva Ley Federal del Trabajo de Noviembre de 2012, se ha
agravado la contradicción entre los empresarios capitalistas y el trabajo
asalariado, dado que facilitan los despidos de los trabajadores,
aumentan la flexibilidad, legalizan su subcontratación, y otras medidas
semejantes para evadir prestaciones y abaratar la mano de obra y limitar el
derecho de huelga, forman parte de esta ofensiva contra los trabajadores.
· Esta
situación además nos confirma que la sociedad mexicana está en un proceso de
división en dos grandes clases, en dos grandes campos enemigos: La burguesía,
empresarios dueños de los medios de producción (tierras, agua, bosques,
herramientas, fábricas, etc.), y los proletarios (obreros, trabajadores del
área de servicios, cuya única propiedad es su fuerza de trabajo). Hay que
observar que además existen en México un amplio número de campesinos, de
indígenas, y de capas de pequeña burguesía, con una situación económica cada
vez más precaria.
Análisis de la división clasista del
Banco Mundial
A
la luz de datos oficiales, particularmente de datos del Instituto de
Estadística y Geografía(INEGI), podemos desarticular la hipótesis del Banco
mundial en el sentido de que existen cuatro clases sociales en México:
1. Clase
Pobre
Según
el B.M. son aquellas personas que ganan de cero
a cuatro dólares diarios, es decir, en el caso de México ganarían $48 pesos
con 36 centavos, al tipo de cambio de hoy. De acuerdo a datos del INEGI,
tendríamos entonces que serían gente en pobreza extrema, dado que ni siquiera
adquirirían un salario mínimo cuyo promedio es de $65 pesos diarios. (Consultar
anexo).
2. Clase
vulnerable
Dice
el BM que son aquellas personas que ganan de cuatro a 10 dólares diarios, o sea, trabajadores
cuyos ingresos son de $ 48 pesos con 36 centavos a $120 pesos con 90 centavos.
Este grupo de trabajadores, los
ubicamos en el universo de la Población Ocupada, al primer trimestre de 2013,
en dos sectores: los 6 millones 349 mil 868 trabajadores que ganan hasta un
salario mínimo ($65 pesos diarios), y
los 11 millones 086 mil 177 trabajadores que ganan diariamente más de
uno hasta dos salarios mínimos ($ 130 pesos diarios).
David Miranda
Perez.
Trabajador
Electricista en Resistencia
Miembro activo
del sindicato Mexicano de Electricistas
Traduccion del articulo del Washington Post:La Clase Media en America Latina
Traduccion del articulo del Washington Post:La Clase Media en America Latina
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